El colectivo txirrindulari hemos sufrido una nueva desgracia en la carretera. Otra muerte, otra tragedia. Esta vez no ha sido alguien anónimo y lejano, sino una figura próxima y entrañable. Con ello volvemos a recordar que en la carretera y sobre la bicicleta somos tan vulnerables los aficionados como los profesionales. La muerte no entiende de categorías.
A pesar de no haber tenido mucho trato con Iñaki puesto que apenas coincidimos en alguna prueba de ciclocross y de MTB - la última la Extrem Bilbao en junio- sí que tuve la oportunidad de apreciar que ciertamente era una persona agradable y cercana; una figura sí, pero todo un caballero. Mi disgusto fue tremendo el domingo a mediodía cuando Unai Yus me hizo partícipe de la triste noticia. Muchas han sido las reacciones en medios de comunicación; mucha indignación, especulaciones, protestas, dolor, rabia, impotencia... Ya desde los primeros momentos se alzó la voz: Basta ya ! Y en pocas horas se fraguó la iniciativa comenzada por algunos como Iñigo del Hoyo, cuyo testigo ha terminado recogiendo la Federación Vizcaína de Ciclismo (como no podía ser de otro modo). Como consecuencia de ello, este domingo 22 a las 11,00 de la mañana nos juntaremos en la explanada del Guggenheim -la misma que nos vió partir y llegar en la Extreme- varios miles de ciclistas de todo tipo, edad y condición para llegar escoltados por vehículos de la Federación hasta el punto donde el coche arrolló a Iñaki, donde se realizará un acto en su memoria.
Desde este humilde y casi anónimo rincón de la Red, vaya mi modesto homenaje a Iñaki y a todas las victimas de este deporte que es nuestra vida y -en algunas ocasiones también- nuestra muerte. Por que la suya no haya sido en vano, y no tengamos que lamentar nuevamente este tipo de sucesos.
Descansa en paz, Iñaki!!
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| Charli, Marino, Imael y Oscar Bustos. Foto Charli (Carlos García) |
Siempre que ocurre un accidente así, uno se plantea que medidas se podria tomar para evitarlos.
ResponderEliminarCada vez tengo la sensación de que la mayoria de los conductores son mas respetuosos con el ciclista, y que los ciclistas somos mas cautelosos a la hora de circular por ciertos trayectos, pero aun asi de vez en cuando tenemos algun incidente. Y como en cualquier actividad humana es imposible la seguridad total.
Me llena de pena la perdida de este hombre, y mas pena por que nos vemos reflejados en el, me lo imagino el domingo cogiendo la bici y dando las primeras pedaladas pensando el recorrido que vas a hacer y luego sin mas todo se acabo.
No podre asistir el domingo a la concentración homenaje del domingo
pero si me hubiera gustado asistir de haber estado.
Tened cuidado y suerte
Todos somos Iñaki Lejarreta !! El domingo debemos estar a las 11 en el Gugenheim para apoyar este deporte que tanto queremos. Imanol
ResponderEliminarAunque no soy ciclista, cuando se publican accidentes de este tipo, se me ponen los pelos de punta.
ResponderEliminarOjalá fuese el último que se produce.
Un cordial saludo,
Paco (Javichi) de Zaragoza
Recibido por mail de mi amigo cántabro Fran González Zabala:
ResponderEliminarHola Javi:
Como siempre , me quito el sombrero contigo.Además de buena persona , sabes dar en el clavo con las palabras en el momento justo.
No podré estar en Bilbao con vosotros en presencia por trabajo , pero si en sentimiento.
No se que decir en estos momentos de tristeza , sobre todo para su familia y sus amigos , solo acompañar en el sentimiento.
Son muchas las cosas que a uno se le pasan por la cabeza , y muchas cosas las que después se leen , se escuchan....
No todas son buenas ni justas , pero es humano reaccionar ante cosas dolorosas , y me estoy refiriendo al conductor que tuvo la desgracia de atropellar a Iñaki.
No sé si iria bebido , despistado , o simplemente no lo vió , pero son cosas que pasan y que desgraciadamente seguirán pasando , porque esto no se soluciona de una manera radical , a no ser que directamente nos separen en carreteras independientes (utopía).Solo una concienciación por parte de conductores y ciclistas podrá poner freno a estas desgracias , aunque nunca dejarán de producirse.
Quizás no sea lo más politicamente correcto el ponerse en el lugar del conductor en este momento , pero te juro que he pensado mucho en esa persona en estos días , sea culpable o inocente , en su familia y en las personas allegadas a el.
Tengo en mi memoria las imagenes del funeral hace yá 30 años de mi vecino Inguanzo , y tengo en mi memoria la imagen del conductor (camionero) que tuvo la fatalidad de atropellarlo , y el sufrimiento de aquella persona , que desgraciadamente segó la vida de un joven ilusionado ante el futuro como deportista , y se llevó las ilusiones de su familia , su novia....
Son fechas muy señaladas , en las que si cabe aún más se agudiza el dolor por la perdida.
De mi parte solo aompañaros el Domingo en el sentimiento.
Recibido por mail de Ricardo Leániz:
ResponderEliminarGracias por expresar lo que muchos sentimos.
Leanizbarrutia
Recibido por mail de Miguel A. Marroquín (Madrid)
ResponderEliminarTú ten mucho cuidado. La carretera es muy peligrosa.
Cuando alguien tan joven como Iñaki muere, algo dentro de cada uno de nosotros muere también, porque vemos una vida truncada, pero en el caso en el que esa muerte es tan repentina y debida a un fallo achacable a otra persona mas aun.
ResponderEliminarQue los ciclistas se la juegan cada vez que cogen la bicicleta es un hecho no hace falta discutirlo, pero merece la pena discutir el motivo, que en muchos casos es que como voy con prisa, aunque no tengo mucho sitio para adelantar, me arrimo un poco al ciclista y ya está.
Esa es una de las principales razones de los atropellos y las muertes de ciclistas en carretera.
Como a todos, la muerte de un chico de 30 años ha movido algo en mi interior, Iñaki D.E.P. y sigue pedaleando en los bidegorris y pistas infinitas del cielo.
Un fuerte abrazo y mucho ánimo a su familia y amigos.
Ricardo Flores