Tomateros de Deusto

Hace tiempo que le dije a Javi Goñi, antiguo compañero de Telefónica y capo del gupo de cicloturistas de Deusto, que me apetecía dar un paseo con ellos algún día. Y hoy el pronóstico anunciaba buena temperatura con nubes y claros hasta las doce donde podría aparecer alguna llovizna débil.
A las 8,40 he pasado por la fuente bajo el edificio del tigre en Deusto y como aun era pronto he dado una vuelta por el bidegorri hasta el Ayuntamiento. Al regreso, 8:52, ya había media docena de cicloturistas y hemos esperado al resto -Javi incluído- para salir poco después de las 9:00 hacia La Capitana unos, otros para Okendo y yo, con idea de estar en casa sobre las doce. Total alguien ha contado 16 personas aunque en Castrejana nos esperaba otro más. Un grupo majo compuesto por gente de distinto nivel, lo que ha propiciado que nos hayamos dividido en varios grupillos hasta La Quadra donde los que iban para Okendo han optado por el bidegorri por la margen derecha del Cadagua. El resto hemos seguido por Sodupe y Zalla superando Herbosa bastante juntos. Arriba ha comenzado a chispear y el aspecto del cielo, sin ser amenazador, tampoco presagiaba mejoría alguna. Como sea que Simón y yo ya habíamos decidido regresar por Sopuerta y Muskiz, una vez llegados a Artzentales nos hemos despedido para empezar el suave y revirado descenso a Sopuerta. La llovizna ya era constante aunque la temperatura ha seguido siendo muy agradable.
Al salir del Ventorro nos ha adelantado un trío de jóvenes pero le he dicho a Simón que tampoco iban tan rápido como querían aparentar. En efecto, con algún esfuerzo extra de Simón (espero me perdone) hemos llegado con ellos a Muskiz y de ahí al bidegorri por la Arena.  En Sanfuentes la llovizna era ya lluvia y nos hemos acordado de los de Trucíos que se iban a mojar bastante más que nosotros. En Portu nos hemos separado pues Simón ha cruzado el Puente Colgante para ir a Getxo y yo he seguido a Barakaldo y Bilbao. He aprovechado el momento para ponerme el chaleco y los manguitos porque ya el calor había desaparecido, y a las 12:30 estaba en casa. 75 km en poco más de 3 horas. Media de ciloturista, ya era hora, jeje....